Más de 300 personas acudieron a la segunda edición de 'Melodies de Barcelona' una iniciativa cultural con el objetivo de recaudar fondos para la Fundació Llars Compartides.
Melodies de Barcelona no es una exposición al uso. Y no lo es por varios motivos, empezando por su original formato que obliga a los asistentes a disfrutar de las obras expuestas en apenas 4 horas. No hay más tiempo para visitar la muestra, que se monta y desmonta el mismo día. Una exposición express que es todo un reto para la organización, pero también, para el comprador –si te enamoras de un cuadro tienes que quedártelo al instante sino quieres lamentarlo–. Para muchos, fue la excusa perfecta para disfrutar de la buena salud del arte más joven de la ciudad y dieron muestras de ello en la red.
Aquí está mi artista #melodiesdebarcelona #aramesart #araceliplata #blueprojectgalery pic.twitter.com/sJ2j9GOnfU
— Isa Correia (@giro_teatral) 7 de mayo de 2016
Melodies de Barcelona surge de una convocatoria pública y, por tanto, la colección que se pudo disfrutar en la sede de la Fundació BlueProject es una pequeña e íntima muestra del trabajo de doce artistas emergentes que han plasmado a través de sus pinturas lo que para ellos representan los sonidos de la ciudad. Sus nombres: Oscar Santasusagna, Clàudia Carreras, Marcela Adasme, Alicia Borssén, Silvia Cuello, Gabriela Cuevas, Sandra de la Cruz, Marcelo Laugelli, Esther Levigne, Joan Parramón , Araceli Plata y Gloria Regal. Algunos de ellos compartieron un avance de sus pinturas a través de las redes sociales.
‘Melodies de Barcelona’ a Blueproject Foundation: arte y compromiso con @AraMesArt – ‘Música’ se va a un nuevo hogar pic.twitter.com/RENUsXlYsX
— Oscar Santasusagna (@OSantasusagna) 7 de mayo de 2016
#melodiesdebarcelona #aramesart #blueprojectgalery pic.twitter.com/AnBKWKleKC — Araceli Plata (@araceliplata) 8 de mayo de 2016
Pero seguramente, lo que defina mejor a Melodies de Barcelona sea su fuerte compromiso con la solidaridad y con ayudar a otros. Y es que como en todas las iniciativas que llevan el sello de Ara més Art, el interés final es social y por ello lo recaudado con la venta de las pinturas de la exposición se entregó a la Fundació Llars Compartides, entidad que lucha por garantizar una vivienda digna y en condiciones a las personas mayores.